Gracias a la Miel las pieles más secas y envejecidas se nutren en profundidad y se mantienen en un estado óptimo de hidratación durante las 24 horas del día.
El Mango ayuda a suavizar las arrugas y líneas de expresión de las pieles más maduras o castigadas a la vez que consigue aumentar la tersura de la piel.
La riqueza en Vitaminas A, C y E del Pepino hace que, esta mascarilla, sea perfecta para conseguir una piel fresca y joven, sin rastro de cansancio.
La Granada es una auténtica aliada para aquellas pieles mixtas o grasas ya que regula el exceso de sebo a la vez que ayuda a combatir los efectos nocivos de los radicales libres.
El Aloe Vera aporta una regeneración profunda a la vez que permite que las pieles más agredidas vuelvan a su estado de belleza natural.